Ángel Lockward cantó como un gallo y puso como una gallina.
Los 10 primeros encartados, batearon para mil. Estaban viendo la pelota clarita.
Los 10 restantes no tendrán ese promedio, pero batearán por lo menos para 500.
Si lo llevan a un bosque, cantarían más que todas las aves juntas.
Se habla que devolverán mucho $$$, y además majestuosas mansiones a todo lo alto y ancho zonas exclusivas.
Parece que no es lo mismo llamar al diablo que verlo llegar. Es mejor en casita que en la V o en N.
Según los cantantes, es mejor un pendejo arrepentido, que un guapo en pantalones cortos, esperando turno para bañarse.
Mañana domingo, parece terminará el martirio para algunos y el morbo para otros.
Se habla de un Calamar 2.0, lo cual deberá estar provocando altos niveles de ansiedad en algunas personas.
Parece que esto está al más alto nivel, ya habló Mirian, Biden, el embajador ante la ONU y hasta Vincho salió del retiro.
Por más que se hable en todos los rincones y confines de esta adorada Isla, la magistrada Kenya tendrá la última palabra.
Los aires de Semana Santa ya empiezan a llegar, así que los dejamos con el rancho ardiendo.